Buscar este blog

domingo, enero 21, 2007

En tu silencio, para vos... aún cuando nunca lo leas

En tu silencio, blanco, suave,

se agita la conciencia y un camino.

En tus pupilas, oscuras y nocturnas,

se esconden propósito y destino.

En tu vientre brota el sueño.

En tus pechos

(pimpollos rosados de estío)

el deseo se estremece

en un milagro.

Palpita tu sangre en mis abrazos;

Y se hace vida,

alma, anhelo, risa y desafío.

Se llena todo el cielo con tu risa.

Principio y fin.

Certeza y cometido.

No hay comentarios.: