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domingo, febrero 17, 2008

Si Dios fuera mujer


Un poema de Mario Benedetti

¿Y si Dios fuera una mujer?

Juan Gelman

¿Y si dios fuera una mujer?

pregunta Juan sin inmutarse

vaya vaya si dios fuera mujer

es posible que agnósticos y ateos

no dijéramos no con la cabeza

y dijéramos sí con las entrañas

tal vez nos acercáramos a su divina desnudez

para besar sus pies no de bronce

su pubis no de piedra

sus pechos no de mármol

sus labios no de yeso

si dios fuera mujer la abrazaríamos

para arrancarla de su lontananza

y no habría que jurar

hasta que la muerte nos separe

ya que sería inmortal por antonomasia

y en vez de transmitirnos sida o pánico

nos contagiaría su inmortalidad

si dios fuera mujer no se instalaría

lejana en el reino de los cielos

sino que nos aguardaría en el zaguán del infierno

con sus brazos no cerrados

su rosa no de plástico

y su amor no de ángeles

ay dios mío dios mío

si hasta siempre y desde siempre

fueras una mujer

qué lindo escándalo sería

qué venturosa espléndida imposible

prodigiosa blasfemia

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Que ha sido del blog novela? ¿le has eliminado o estoy perdiendo reflejos?

Saludos

Anónimo dijo...

Supongo que en lugar de sacerdotes había sacerdotisas y de celibato nada.

Gus dijo...

No, no has perdido tus reflejos.

El blog novela ha pasado al Limbo de los Párvulos.

Gus dijo...

Habría ternura y habría piedad, habría compasión y respeto por la naturaleza, habría pasión y sensualidad.

También habría odios y revanchas, abolición de la Historia y filosofías basadas en el Eterno Retorno, habría crueldad y sacrificios, habría precios que pagar como en todas las religiones.

De hecho ya tuvimos nuestros cultos de la Diosa y nuestros ritos de la fertilidad...

Sibila dijo...

Si Dios fuera mujer, la humanidad seguiría siendo humana.
Y los humanos tenemos la fea costumbre de odiar a todo aquello que no comparta nuestra visión de las cosas, convertir al diferente en inferior, malo, enemigo...

En el mundo de la Diosa también hay odio, y desprecio hacia los que creen en otros Dioses. En el mundo de la Diosa también hay intransigentes, prejuzgadores, gente henchida de superioridad que se cree con derecho a mandar sobre los demás.

Es hermoso leer a Benedetti, y en general, a cualquier poeta fascinado por la belleza y el misterio de la mujer. Es hermoso verse a través de esos ojos. Pero, en el fondo, nuestras diferencias sólo son biológicas y circunstanciales.

El hombre y la mujer crean a Dios a su imagen a semejanza. Mientras nosotros seamos como somos, los Dioses, las religiones, tendrán su dominio explotando nuestras debilidades, en lugar de otorgándonos fuerza.

Gus dijo...

Mientras haya dioses, o diosas, seguiremos siendo esclavos. Cuando los humanos alcancemos la promesa de la Serpiente y seamos como dioses, lograremos la libertad...

Gus dijo...

...o quizás mejor cuando dejemos de esperar en divinidades, cuando nuestra vida no necesite de otras maravillas que una puesta de sol, la estructura de la materia o la ternura de un beso, cuando reconozcamos que la magia es cotidiana y que el milagro es seguir vivos, cuando, en fin, nos sintamos parte de un universo que ha devenido en autoconsciente, entonces sí habrá llegado (y a la vez estará siempre pendiente) el momento de llamarnos Humanos.
Y gozar con ello...

Anónimo dijo...

La foto está muy bien, normalmente se tapan el chumizo y dejan ver las tetas... supongo que está hecho así adrede.